LLÁMANOS

+34 910 841 019

EMAIL:

info@cefegen.es

DIRECCIÓN

C/ Dr. Esquerdo, 112, Bajo C - Madrid

Quien es el hombre de Pekín y cuáles son sus características

El 16 de octubre de 1927 el paleontólogo sueco Birgir Bohlin descubrió en la cueva de Zhoukoudian, cerca de Pekín, un molar izquierdo muy bien preservado. Tras un estudio exhaustivo y el hallazgo posterior de más restos, los expertos catalogaron los restos como pertenecientes a un antecesor del Homo sapiens. Concretamente una subespecie del Homo erectus al que dieron el nombre de hombre de Pekín.

 Características del hombre de Pekin

Como hemos dicho el hombre de Pekín es un ejemplo de Homo erectus. Los hallazgos datan de hace aproximadamente 500 000 años, aunque nuevos estudios sugieren que pueden tener hasta 680,000 – 780,000 años de antigüedad.

¿Cómo era el hombre de Pekín?

El hombre de Pekín tenía varias similitudes con los humanos modernos, pero también poseía varias diferencias. Según la Encyclopedia Britannica:

El hombre de Pekín se caracteriza por una capacidad craneana que promedia unos 1,000 cm cúbicos, aunque algunos cráneos individuales del cráneo se acercaron a 1,300 cm cúbicos, casi del tamaño de los hombres modernos. El hombre de Pekín tenía un cráneo que era plano en el perfil, con una frente pequeña, una quilla en la parte superior de la cabeza donde se fijaban los poderosos músculos de la mandíbula, huesos del cráneo muy gruesos, un toro occipital (bulto prominente o proyección del hueso occipital en la parte posterior del cráneo), un gran paladar y una gran mandíbula sin mentón. Los dientes son esencialmente modernos, aunque los caninos y molares son bastante grandes, y el esmalte de los molares a menudo se arruga. Los huesos de las extremidades son indistinguibles de los de los humanos modernos. El hombre de Pekín es posterior al hombre de Java y se considera más avanzado al tener una mayor capacidad craneal, una frente y caninos que no se superponen.

En las cuevas de Zhoukoudian (hoy patrimonio de la Humanidad) también se encontraron señales de que el hombre de Pekin habría conocido el fuego y el uso de herramientas.

Algunos paleoantropólogos chinos han afirmado en el pasado que los chinos modernos (y posiblemente otros grupos étnicos) son descendientes del hombre Pekín. Sin embargo, las investigaciones genéticas no respaldan esta hipótesis. Un estudio reciente realizado por el genetista chino Jin Li mostró que la diversidad genética de los chinos modernos está dentro de la población mundial. Esto muestra que los chinos descienden de África, al igual que todos los demás humanos modernos.

Por desgracia los fósiles originales se perdieron durante la Segunda Guerra Mundial, y solo se conservan los moldes de silicona. Excavaciones posteriores encontraron nuevos restos.

Avatar de Dra. Mercedes Alemañ
CEO & Directora Técnico en 

Especialista en Bioquímica Clínica,  Experta en Genética Clínica y Antropología Forense, Experta en Consejo Genético, Master en Reproducción Humana Asistida.